Los
principales alimentos ricos en azufre son huevos, carne roja, pollo,
pescado, y la leche y sus derivados. Los veganos satisfacen la ingesta de
azufre a través del consumo de soja, semillas, granos y nueces. El azufre es el
tercer mineral más abundante en el cuerpo humano, en términos porcentuales, con
relación al peso total corporal.
El azufre es el
sexto mineral presente en la leche materna en cuanto a cantidad. Además, está
implicado en el metabolismo energético del cuerpo de forma directa. El hígado
lo emplea para la eliminación del alcohol y su desintoxicación de otras
sustancias químicas, toxinas y metales pesados.
El azufre
mantiene los tejidos conectivos, la función muscular y el sistema nervioso y es
un elemento esencial para la vida. No hay un valor de ingesta diaria
recomendada para el azufre y no se ha reportado toxicidad o efectos provocados
por la carencia de este elemento.
Sin
embargo se ha sugerido que una ingesta de 0,2 a 1,5 gramos de azufre al día
debería ser suficiente para obtener todos los beneficios de este mineral y, al
mismo tiempo, garantizar que se está consumiendo de forma responsable y sin
caer en los excesos.
Lista de alimentos ricos en
azufre
La
principal fuente de azufre en la alimentación son los aminoácidos cisteína y
metionina, que forman parte de algunas proteínas. Otro compuesto químico
azufrado ingerido con algunos alimentos es el metilsulfonilmetano (MSM),
también conocido como metil o dimetil sulfona.
Este
es una forma orgánica de azufre y un antioxidante muy efectivo que puede
encontrarse de forma natural en las crucíferas y aliáceas, en las frutas y la
leche cruda. Sin embargo, en el caso de los alimentos vegetales el
contenido de MSM puede variar según la composición en azufre del suelo donde
fueron producidos.
Una
tercera fuente sulfurosa son los alimentos aportadores de dos de las vitaminas
del complejo B: tiamina o vitamina B1 y biotina o vitamina H o B7. El azufre es
el responsable del aroma característico del ajo, de las sustancias que
estimulan las glándulas lacrimales al cortar una cebolla, del olor de la orina
al comer espárragos y del olor del huevo podrido.
Vegetales crucíferos
Brócoli,
coliflor, repollo, col rizada, espárragos, nabos y coles de Bruselas son
fuentes ricas en sustancias azufradas conocidas como glucosinolatos, las cuales
tienen un aroma acre y un sabor suavemente amargo.
Durante
la preparación, masticación y digestión los glucosinolatos se rompen en
compuestos conocidos como isotiocianatos e indoles, que son estudiados por sus
posibles propiedades anticancerígenas.
El
sulfurano, un compuesto organosulfurado encontrado en el brócoli, el repollo,
las coles de Bruselas y la coliflor inhibe la permeabilidad mitocondrial y
reduce el estrés oxidativo.
En una
comunidad rural en China con altos niveles de contaminación
ambiental y una elevada tasa de incidencia de cáncer en hígado, la ingesta
de una bebida hecha con brócoli rica en sulforanos incrementó la excreción
urinaria de las partículas propias de la contaminación atmosférica.
El
consumo de brotes de brócoli redujo el estrés oxidativo en diabetes tipo 2 en
un ensayo doble ciego, empleando un placebo con el grupo control. Los
compuestos organosulfurados de todos los tipos de crucíferas tienen el
potencial de reducir o contraatacar los agentes cancerígenos derivados de la
cocción a altas temperaturas.
Carnes
Los
alimentos ricos en proteínas, como pescado, pollo y carnes, no solo son
fundamentales para la construcción y el mantenimiento de piel, uñas y cabello
sanos, sino que además son una buena fuente de azufre. La cisteína y metionina
son dos aminoácidos azufrados presentes en los alimentos cárnicos y sirven como
fuente de azufre para las células.
Dependiendo
del corte, las carnes proveen entre 166 y 395 mg de azufre por 100 g de porción
comestible.
El
cordero y las carnes de caza son también buenas fuentes de azufre. Los
aminoácidos sulfurados no solo forman parte de las proteínas, también sirven
como cofactores enzimáticos que ayudan a llevar a cabo ciertas reacciones
químicas.
Huevos
Además de
ser una rica fuente de proteínas, también lo es de azufre, siendo la clara de
huevo la que tiene la mayor proporción. En un huevo cocido hay aproximadamente
190 mg de metionina y 135 mg de cisteína. 100 g de clara de huevo aportan unos
182,5 mg de azufre, y 100 g de yema aportan 164,5 mg.
La yema
contiene colesterol, cuya ingesta está asociada a un aumento de la tasa de
colesterol sanguíneo.
Productos lácteos
Los
lácteos son una buena fuente de aminoácidos azufrados. Entre los productos
lácteos se incluyen diferentes tipos de queso, que proveen entre 186 y 321 mg
de azufre por cada 100 g.
La leche
también aporta azufre pero en menor cantidad. Por ejemplo, en una taza de leche
descremada hay aproximadamente 200 mg de metionina y 50 mg de cisteína.
Sin
embargo, hay que señalar que el MSM se pierde rápidamente durante el
calentamiento, así que, por ejemplo, la leche pasteurizada no es un buen
aportador.
Pescados y productos del
mar
La
mayoría de los pescados y productos del mar son buenas fuentes de metionina y
cisteína. Los pescados aportan entre 171 y 270 mg de azufre por cada 100
g de porción comestible. En 100 g de mariscos hay entre 265 y 401 mg de azufre.
Aliáceas
Ajo,
cebolla, puerros y cebolla de verdeo o cebollín contienen compuestos
organosulfurados que han mostrado prometedoras propiedades anticancerígenas en
estudios in vitro. Los compuestos azufrados del ajo protegen a los ratones
(sujetos del estudio) del daño peroxidativo e incrementan la actividad del
glutatión en el hígado.
El
glutatión es el mayor antioxidante en el cuerpo. Si previo a la cocción se
prepara la carne marinada en ajo y cebolla, se reduce la formación de aminas
heterocíclicas, que son compuestos cancerígenos.
Los
compuestos sulfurados derivados de la cebolla mejoran la tolerancia a la
glucosa en ratas diabéticas, lo que no hacen los compuestos derivados del ajo.
Por otro lado, la mostaza aporta 1280 mg de azufre por cada 100 g.
Alga espirulina
Una
porción de media taza de espirulina, un alga marina, contiene 650 mg de
metionina y 370 mg de cisteína. Una porción de una taza de granos de soja tiene
1000 mg de metionina y 1200 mg de cisteína. Además, el té es un gran aportador
de azufre, otorgando unos 177 mg por cada 100 g.
Muchos
tipos de nueces proveen esos nutrientes, incluyendo las nueces de Brasil, las
cuales tienen 65 mg de metionina y 245 mg de cisteína en media taza.
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